Que perturba tu paz,que te puedo dar que no encuentro,
como hago para disolver la sangre derramada.
Porque no puedo curar tus heridas, quien soy yo
para permitir y obrar milagros?
Triste, tristemente sentada sobre tu sombra alargada,
que me pide en silencio relatos cortos para quedarse dormida.
Vestida con retales de telas sutiles, envejecidas por los años,
cultivas esperanza, remites cartas al olvido, sellos de papel
mojado con lágrimas de sal.
Sustancia en espacio abierto, carretera a lo desconocido,
sin retorno, sin perdón, costilla de mi cuerpo, que me arrancaste
una madrugada ladrona, furtiva, misteriosa, perdida.
Disfrazada de duende, que te puedo dar mujer triste,
que te puedo dar nostalgia?.
By fran
 |
| Mujer triste |
No hay comentarios:
Publicar un comentario