Siempre hay un árbol que da buena sombra, grande o pequeño..siempre hay un árbol.
Ella pidió la luna, y él la pintó en cada noche,
con cada gota un momento, en cada pincelada.
Ella pidió el sol, y quemándose él abrazaba los rayos,
se curaba las heridas con lágrimas de su rostro.
Ella pidió la nada, y él imaginó una a su antojo,
tan negra como cualquier sombra, silenciosa.
Ella pidió sin pedir, y él amontonaba historias
en su recoveco minúsculo, en su cama yacían sus sueños.
Ella vive en todas las tardes, en formas cualquiera
en minutos y horas enteras.
Ella ríe y llora, y él simplemente adora.......
en su aurora, en la puerta de cualquier momento,
en el calor y el frío, crecen sus raíces, fuerte, valiente y
arraigado, la mira cada madrugada la viste cada amanecer,
la acuna cada noche, y sus ramas siempre le dan su sombra.
Ella pidió la luna, el sol y la nada...y siempre tuvo su sombra.
(byfran).
Fotografía: Fran Luque. |
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