El guión está escrito, sólo me queda la meta de sobrivir una nueva jornada, sin acabar intacto pero reforzado por lo conseguido.
Quien sabe si esta noche seguiré aquí, o cuantos quedaremos y como. Quien sabe si podré dormir, o al menos hecharme entre sacos mojados y con los ojos abiertos pero aletargando la mente, recordaré tiempos mejores casi todos pasados, ya que nuestro futuro, a parte de incierto, depende de un continuo capricho de la suerte y el destino.
Sin tiempo para el olvido la máquina de una sociedad, tan engranada como imperfecta, nos obliga a un esfuerzo titánico para seguir respirando.
El consuelo de conseguir guardar al final del día en mi cabeza una foto, una sonrisa, un abrazo, un recuerdo perfecto de esos inquebrantables, es lo que realmente me mantiene vivo, la ansiedad desmesurada me mataría en pocas horas, la recompensa pasa por empapar el corazón de todas esas cosas con paciencia pero sin prisa, un día, otro día, y uno más, y otro y otro..............
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