El asfalto que un día te dió la gloria, hoy te siega la vida,
a manos del destino, donde siempre se cruza un amigo.
Quien te lleva en volandas cuando estás roto, no encuentras el norte o simplemente te ama, no recibe jamás la recompensa que no busca, recoge los pedazos que la vida le otorga y su dedicación.
El olvido hacia el terror es la prolongación de una causa perdida y renace la furia con la que debió dejar de existir, es la hora de quienes se creen importantes y se colocan en primera fila, para hacer como suyos los logros y sus pretensiones.
Es la hipocresía, el egoísmo, las falsas verdades o medias mentiras, el ego y las ganas, la errónea valentía, la educación no otorgada, o simplemente equivocada, la que nos ha llevado ha días como los de hoy, es como si el otoño rezagado mandase a la madre tierra energía negativa, en forma de situaciones y desgracias, para hacernos recordar o simplemente advertirnos de que no somos nada, más que mentes y corazones, piel y huesos,
que la vida, o su cauce, nos devuelve lo proporcionado a veces con extremada desproporción, otras con excasa recompensa.
Hoy el respirar es un lujo, mañana amanecerá de nuevo, y seguiremos viendo,escuchando, sintiendo, parándonos o no, siendo hipócritas, necios, risueños o buscando soledades, triunfos materiales, paz interna o bruscos días.
Volveremos a contar hasta diez, nos seguiremos relamiendo las heridas, acariciando las cicatrices, soñando o no. Seguirán los empedernidos en auto engañarse, y auto engañar al pueblo, los emprendedores a seguir ilustrando sus sueños, el pobre a sobrevivir unas horas más, el egoísta a perfeccionar sus ademanes, la voz seguirá sonando, el miedo latente, el dolor a flor de piel y de los días que empañan este otoño tardío.
Nada es blanco o negro, a veces tampoco parece que haya grises, ese arco iris que nos legó la vida.... hay días que no parece existir. Las personas nos empeñamos en que así sea, en que no importe nada más....que el sobrevivir al precio que sea. (by fran)
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